Vaya nuestro homenaje a las y los 30.000 compañeros desaparecidos, a los miles de perseguidos, detenidos, torturados, exiliados y a sus familias y amistades, quienes creyeron y enfrentaron al poder dominante, luchando por un hombre nuevo, en los marcos de una sociedad más justa, libre e igualitaria. Es nuestro compromiso sostener sus ideales, su lucha y esperanzas.
Es así que hoy no es un día más, es el día en donde recordamos no sólo la impunidad de ayer sino también la de hoy. Muchos de nuestros compañeros y compañeras cayeron bajo las manos de asesinos, que hoy deambulan por nuestras calles y cuentan con el aval de funcionarios, y demás miembros de los poderes de turno. A su vez, los crímenes por los que exigimos justicia no sólo se remontan a más de treinta años atrás, sino en los años recientes y en el presente, las víctimas de la represión se cuentan de miles por el hambre, la criminalización de las luchas populares y la pobreza, el gatillo fácil, la explotación laboral y el desempleo, el saqueo y la contaminación de nuestra tierra.
Queremos rescatar el espíritu revolucionario de todos estos compañeros y compañeras, su fuerza para llevar adelante la lucha por el Cambio Social que todos anhelamos. Y estamos convencidos de que sólo se podrá concretar, si éste empieza desde abajo, en cada barrio, en cada fábrica, en cada facultad, creando una alternativa de poder para los trabajadores y el pueblo y que sea independiente de las burocracias políticas y sindicales. Nuestra Asamblea, como muchas otras, se suma a esta construcción de este poder popular y es parte de las luchas ante este sistema socioeconómico capitalista depredador y generador de miseria.
Hoy también vemos que los responsables ideológicos del terrorismo de estado, el imperialismo, con Estados Unidos a la cabeza, las corporaciones económicas internacionales y nacionales, empresarios, partidos de la derecha y partidos que se dicen populares, continúan sometiendo a nuestro pueblo. Mientras el gobierno nacional y provincial, sus jueces, el aparato policial y los grandes medios se encargan de reprimir, criminalizar y acallar nuestras protestas.
Convocamos a estar más unidos que nunca, organizándonos desde abajo y fortaleciendo nuestro campo popular. Para enfrentar a quienes nos siguen oprimiendo debemos estar juntos, más allá de las diferencias, para construir de poco esa otra sociedad, ese país por el que dieron y siguen dando la vida nuestros compañeros y compañeras desde hace 34 años.
Por eso, en este lugar, las asambleas junto a todas las organizaciones populares hoy presentes nos ponemos de pie para gritar:
BASTA DE IMPUNIDAD, CÁRCEL A LOS GENOCIDAS!!!
BASTA DE HAMBRE, SAQUEO Y CONTAMINACIÓN!!!
BASTA DE REPRESIÓN A LOS SECTORES POPULARES y FUERA LA GENDARMERÍA!!!
FUERA EL IMPERIALISMO DE AMÉRICA LATINA!!!
